Ángela Santianes, presidenta de DuPont para España y Portugal, ha tomado hoy posesión de su cargo como presidenta del Consejo Social de la Universidad de Oviedo. Santianes ha asumido su nuevo cometido en un acto institucional, desarrollado en el Paraninfo del Edificio Histórico, que ha contado con la presencia de Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo, arropado por su equipo de gobierno, y el presidente del Ejecutivo asturiano, Adrián Barbón, entre otras autoridades.

Santianes ha centrado su intervención en los retos que deberá asumir la universidad en el futuro y ha incidido en la necesidad de dar un paso más para pasar del papel de control que tiene el Consejo Social a un rol más estratégico. La nueva presidenta, segunda mujer que estará al frente del consejo, ha abogado además por establecer un canal de comunicación entre empresa y universidad para engrasar los puentes entre ambos estamentos.

Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo, ha glosado la figura de Santianes, a quien ha agradecido asumir el reto de “traer a nuestra centenaria institución universitaria su voluntad de crecer y hacerlo con el vigor y la determinación con las que siempre ha afrontado los desafíos”. Precisamente hablando de retos, el rector se ha detenido en la aprobación de los Estatutos, respaldados ayer casi unánimemente por el Claustro, y ha citado también aspectos como la Alianza INGENIUM o el futuro Campus de El Cristo, los presupuestos de 2025 o la adaptación de las plantillas de profesorado a las exigencias de la LOSU. Villaverde ha recordado que todas estas circunstancias obligan a adelantar las elecciones al rectorado. “No adelantarlas solo provocaría serios perjuicios a la comunidad universitaria, y el más elemental sentido de la responsabilidad institucional no solo aconseja, impone, el deber de iniciar esta nueva etapa con un mandato renovado para continuar con la tarea que emprendimos en el año 2021”.

Villaverde se ha referido, por último, al importante papel que debe desempeñar el Consejo Social, al que ha definido como “una pieza indispensable” de nuestra universidad. “Es ese puente entre la academia y la sociedad a la que servimos. Espero de corazón que no piensen que su única labor es la de fiscalizar nuestra actividad económica. Les necesitamos para que nos ayuden activamente a estrechar los lazos entre universidad y su entorno, a convencer de que invertir en universidad es una apuesta segura, a ser más fuertes porque lo somos en nuestro entorno y que este se sienta involucrado en el devenir de su universidad”, ha concluido.