"La Universidad quiere mostrar el reconocimiento a vuestra lealtad, a vuestra solidaridad y al amor a esta institución que se siente orgullosa de sus más de 400 años de historia y que posee una extraordinaria firmeza e ilusión para seguir construyendo el futuro". Con estas palabras se refirió el rector, Santiago García Granda, a las personas del PDI y del PAS que se han jubilado recientemente tras décadas de dedicación a la Universidad de Oviedo, y que han recibido hoy las insignias en un solemne acto celebrado en el Paraninfo.

En total han sido 74 las personas homenajeadas: 49 de ellas se han jubilado tras superar los 35 años de dedicación, y 21 lo han hecho después de desarrollar su trabajo más de un cuarto de siglo, por lo que reciben las distinciones de oro y de plata, respectivamente. Completan la cifra los cuatro profesores reconocidos a título póstumo, Andrés Corsino, Blas Arganza, José Miguel Mesquita y Jesús Albornoz.

En el acto, el rector estuvo acompañado de su equipo de gobierno, así como de la directora general de Universidades, Cristina Valdés; la defensora universitaria, Paz Andrés; y los rectores Juan López Arranz y Vicente Gotor.

La ceremonia de este mediodía contribuye "a conservar los valores –no solo históricos, sino también presentes- que encierra simbólicamente la insignia que habéis recibido con el escudo de Fernando de Valdés, fundador de nuestra Universidad", indicó Santiago García Granda.

El rector, recordando unos versos de José Saramago, aseguró que los homenajeados "poseéis toda la legitimidad para gritar lo que pensáis, para hacer lo que queréis, para reconocer yerros viejos, para rectificar caminos y atesorar éxitos. Éxitos que habréis alcanzado en la esfera personal, pero también en favor de la Universidad".